Un buen propósito para el año que comienza

Son trending topic las listas de buenos propósitos para este año que comienza. Es bueno ilusionarse con un nuevo año y marcarse objetivos que nos ayuden en la mejora personal.

He encontrado uno en la última película de Pixar, Soul. Entiendo que los niños no capten buena parte del mensaje, pero seguro que la animación, una vez más, soberbia, les gustará.

Lejos de ponerme a criticar o completar la visión que puedan ofrecer del más allá o del más atrás, que no deja de ser una “peli de dibujitos”, sólo puedo alabar la reflexión sobre la vida misma que ofrece.

Joe Gadner se encuentra en el momento delicioso de su vida e inesperadamente cae en un hoyo y echa al traste su existencia. Para él, el objetivo será volver a toda costa a su cuerpo y retomar la vida por donde la había dejado. No cuento más.

Sólo reflexionar acerca de lo que él aprenderá durante su peripecia. La importancia de disfrutar de las pequeñas cosas del día, que a veces, tan ocupados en mil cosas, ni alcanzamos a ver. Vista su vida desde fuera es capaz de comprender cómo, de alguna manera, tan importante es la meta como el camino. Me parece que es una bonita metáfora que nos puede animar a vivir el momento presente.

Cada uno sabrá cómo logra hacer realidad esta capacidad, de disfrutar de cada instante. Habrá quien necesite practicar mindfulness, quien tenga simplemente que levantar el pie del acelerador, o quien ya lo hace de suyo, pero pararnos a ser consciente de las realidades que vivimos, puede ser un buen propósito para el año que comienza. Más si como deja caer en algún momento la película, eso pasa por mirar con más detenimiento al otro.