Chispazos de luz (Pensamientos inquietantes #8): Gracias a la vida
Este artículo (Cómo saber dar gracias a la vida, de Crear Salud) me ha recordado aquella sesión que tuvimos a finales de curso pasado con Interaxion (gracias, @luisblazquez) donde nos propuso una meta que sale tangencialmente en este artículo, y que ni yo he conseguido implementar a tope pero que merece la pena practicar y que puede ser útil:
Después... toda la mañana... y después ... todo ese día.
Esto es muy poco a poco, estamos hablando de que los programas como Habit Bull y esos que me gustan tanto, dicen que como mínimo un hábito se crea en ¡¡¡66 días!!! O sea, entre 8 y 9 semanas.
Después, se pasa al día feliz. Y después, a los dos días felices.
Y no nos engañemos, no vamos a llegar a la Semana Feliz, quizás antes hemos llegado a la Semana Santa de 2020, pero notaremos que hemos mejorado.
Por cierto, gracias a Jaime por haberme hecho encontrar el título correcto a esta serie de entradas.
LA HORA FELIZ
(no la de las cervezas, ésa será en otra entrada)
Se trata de empezar por ponerse la meta de un día a la semana, en una hora concreta, evitar las quejas interiores y exteriores.
Una vez logrado ese primer paso, se puede extender a un rato más largo ese día a la semana.Después... toda la mañana... y después ... todo ese día.
Esto es muy poco a poco, estamos hablando de que los programas como Habit Bull y esos que me gustan tanto, dicen que como mínimo un hábito se crea en ¡¡¡66 días!!! O sea, entre 8 y 9 semanas.
Después, se pasa al día feliz. Y después, a los dos días felices.
Y no nos engañemos, no vamos a llegar a la Semana Feliz, quizás antes hemos llegado a la Semana Santa de 2020, pero notaremos que hemos mejorado.
Por cierto, gracias a Jaime por haberme hecho encontrar el título correcto a esta serie de entradas.
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